Escurre el caldo de los garbanzos, pásalos por agua fría para que queden sueltos y sécalos muy bien para que a la hora de freírlos no se cuezan y queden bien crujientes. Puedes hacerlo con papel absorbente de cocina, con un paño limpio o en el horno a fuego suave.
Fríe los garbanzos en una sartén con abundante aceite de oliva suave. Escurre sobre papel absorbente de cocina y ponlos en un bol. Condimenta con una pizca de comino en polvo, pimentón, polvo de jengibre, cúrcuma, ajo y cebolleta picados. Mezcla bien.
Tuesta las almendras y el sésamo en una sartén sin aceite.Prepara una vinagreta con un chorrito de vinagre de Módena, pimienta, sal, un chorro de aceite y cebollino picado. Mezcla bien.
Coloca en el fondo de un plato hojas de lechugas variadas: roble, rizada roja, escarola, rúcula, canónigos y lechuga. Añade la carne del aguacate troceada, unas aceitunas negras y los garbanzos especiados. Agrega las almendras y el sésamo tostado y adereza con la vinagreta en el último momento.
Por ultimo, sirve.Receta de: Bruno Oteiza